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“Esa primera impresión”. La forma en que construimos nuestras relaciones profesionales y también personales dependen mucho de “la primera impresión”. De ese primer momento en el que estrechamos la mano de alguien o das los dos primeros besos “ya empezamos a juzgar y a actuar” de un modo u otro.

¿Recuerdas la última vez que te presentaron a alguien? ¿Le juzgaste en los primeros 5 minutos de relación? Probablemente sí, y probablemente, además, esa primera impresión pudo determinar el curso de la relación futura (personal o profesional). Y ahora invierto la pregunta sobre ti (sobre mí), ¿qué dice la gente de ti o de mí? ¿sabes “entrar con buen pie” a las personas?

Formamos parte de una sociedad que juzga, lo vemos a diario. A mi entender ya es motivo suficiente para que utilices lo que esté al alcance de tu mano para que las personas que están contigo se sientan cómodas, pero más importante aún, lo mejor es que quieran estar contigo, no escatimes esfuerzos.

Yo llamo… “entrar con buen pie” a querer y saber establecer relaciones positivas y constructivas siendo auténtico desde el minuto 1 en que interactúas con esa persona o personas. Pero también tengo claro que para “saber establecerlas” la actitud tuya es primordial y por supuesto tienes que dominar algunas habilidades sociales.

En todos estos tipos de habilidades sociales generalmente se definen la asertividad y empatía como los ejes centrales. Ambas pueden afectar de forma notable las habilidades para relacionarse socialmente. Puedes ampliar aquí (el líder practica la asertividad) (líder y empatía, entrena tu mente)

Vivir con los demás es un arte (recuerdo cuando compartía piso siendo estudiante universitario y también los primeros años de andadura profesional) que puede aprenderse no sólo para caer bien, sino porque la integración social es un factor clave del bienestar emocional.

Las habilidades sociales son una serie de conductas y gestos que expresan sentimientos, actitudes, deseos y derechos del individuo, siempre de una manera adecuada. Para entrar con buen pie tienes que manifestar una conducta social habilidosa.

¿Por qué en el mundo de los negocios estas habilidades cobran tanta importancia?

Veamos algunas de las ventajas:

  • Porque nos ayudan a proyectar una imagen positiva de nosotros mismo
  • Porque nos ayudan a generar credibilidad en nuestro entorno,
  • Porque nos permiten adecuar nuestra conducta y lo que esperamos de los demás.
  • Porque contribuyen a formar una buena impresión sobre nosotros en la valoración de las personas que interactúan con nosotros.
  • Porque nos ayudan a generar en las personas que nos perciben, atributos emocionalmente positivos (es lo que popularmente se conoce “por caer bien”)

Por lo tanto, una conducta “socialmente habilidosa” se define como un conjunto de conductas emitidas por un individuo en un contexto interpersonal que expresa sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de ese individuo de un modo adecuado a la situación.

Además, también significa que respetas esas conductas en los demás y eres capaz de resolver de inmediato los problemas surgidos en una situación determinada minimizando la probabilidad de futuros problemas.

 Las habilidades sociales son esenciales para obtener 2 tipos de objetivos:

  •  Objetivos afectivos: orientados a conseguir relaciones satisfactorias con los allegados y con los demás, estableciendo amistades, relaciones afectivas y refuerzan la autoestima.
  •  Objetivos instrumentales: orientados a conseguir actividades con éxito en la interacción con los demás, y de acuerdo a la consecución de una finalidad: comprar, vender, influenciar, persuadir, motivar, guiar, asesorar, etc.

Ante la conducta de las personas nos formamos una impresión global, llamada por los psicólogos “molar”, que está formada por mini conductas específicas, llamadas “moleculares”.

Es preciso hacer hincapié en estas últimas: en esas mini conductas, gestos, miradas, lenguaje, expresiones, imagen, etc. que construyen una determinada imagen de nosotros mismos y que se proyectan en cada una de nuestras palabras y en cada uno de nuestros gestos.

Llegados a este punto, te reto a plantearte: ¿qué 4 componentes intervienen en el juicio que nos hacemos de las personas cuando inicias una relación con ellas?, pues a por ellos, trabájalos y ponlos en práctica, no hay tiempo que perder y entra en #ModoAcción.

  1. Componentes no verbales: se refieren a aquellos elementos de la comunicación no verbal, y que por tanto no emplea estrictamente el lenguaje. Proyectan una determinada imagen a partir de los gestos, Ia mirada, la postura, el tono de la voz, las pausas, el timbre, Ias expresiones faciales, etc.
  2. Componentes paralingüísticos: se refieren a aquellos elementos de Ia comunicación verbal. La que emplea el lenguaje, que no se refieren al contenido de los mensajes o las ideas que queremos transmitir y que, sin embargo, contribuyen o no a reforzar aquello que queremos expresar. Por ejemplo, el tono, la fluidez verbal, la velocidad, los silencios, etc.
  3.  Componentes verbales: se refiere al contenido de lo que queremos expresar. Es decir. el mensaje o la idea que se transmite.
  4.  Habilidades sociales: es el conjunto de capacidades o aptitudes de actuación aprendidas, que nos permiten establecer relación con los demás de una forma constructiva e instrumental. Es decir, orientada a un determinado fin.

Tengo la enorme suerte de formar parte de un excelente equipo de personas que nos estamos desarrollando para ser coaches ejecutivos. Somos once, muy poquitos sí se conocían de antes, el resto no nos conocíamos de nada. El primer encuentro hace tres semanas fue mágico, se establecen alianzas y entras de lleno en conocerte, sí, lees bien, ¿cuánto crees que te conoces? En las primeras líneas te invertí una pregunta ¿qué dice la gente de ti o de mí?, ¿Qué te hace sentir esta cita de Jorge Bucay que te pongo a continuación?

Sólo si me siento valioso por ser como soy, puedo aceptarme, puedo ser auténtico, puedo ser verdadero

Jorge Bucay

Está autenticidad está relacionada con la Verdad, Aceptación y Sinceridad, ¿cómo VAS de auténtico?

Es posible que te esté cambiando la forma de enfocarlo en este momento ¿cómo te ves?  ¿Cómo crees que te afectaría forzar el deseo de agradar, o empeñarte a fondo en que todo el mundo te acepte? ¿Cómo te afectan esos juicios críticos que comentaba al comienzo? ¿dónde está tu poder de la autoestima?

¿Cuánto te conoces? ¿cuánto de respetas? ¿Cómo llevas la coherencia? ¿Qué importancia le das a tu LIBERTAD? ¿Cuándo, cómo y cuánto VAS de auténtico? ¿Cuándo empiezas? Si ya has empezado ¡mi más sincera ENHORABUENA!

 

Gracias por acompañarme hasta aquí

7 comentarios en «¿Debo entrar con buen pie?»
    1. Gracias Juan por tu observación. Me limito a aprender y compartir. Valoraciones como estas me entusiasman y animan a superarme, son el combustible para seguir y seguir. Mi objetivo es aprender y compartir. Sigo a tu disposición Juan. Un abrazo

  1. Es tan fácil entrar con buen pie contigo! Es tan armonioso aprender contigo! Es tan cómodo crecer contigo. Contigo es tan grande entrar con buen pie! Contigo es tan grandioso avanzar! Contigo entrar con buen pie es excelente!!!! Gracias!!!!!

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